Concejo de NYC presenta propuesta de ley que garantizaría tiempo libre pagado para ayudar a prevenir el cáncer
Activistas de la lucha contra el cáncer aplauden al Concejo de la Ciudad por presentar una legislación que garantice que los trabajadores puedan hacerse las pruebas rutinarias de detección de cáncer
NUEVA YORK, NY – Hoy se presentó en el Concejo de la Ciudad de Nueva York un nuevo proyecto de ley para ampliar el acceso a las pruebas de detección de cáncer. El Proyecto de Ley Int. #1369-2025 requerirá que todos los empleadores privados con cinco o más empleados otorguen hasta cinco horas anuales de tiempo libre pagado para la atención médica preventiva, incluidos los exámenes recomendados por un médico. Esto ayudará a garantizar que el temor a perder parte de su salario o su empleo no sea una barrera para que los trabajadores puedan prevenir, detectar y, en última instancia, sobrevivir al cáncer.
Detectar el cáncer en etapas tempranas, antes de que se propague, ofrece a los pacientes la mejor oportunidad de tratarlo con éxito y sobrevivir a la enfermedad. Por ejemplo, la tasa de supervivencia a cinco años para el cáncer de colon en etapa temprana supera el 90%, en contraste, con un diagnóstico en etapa avanzada, la tasa de supervivencia es apenas del 13%.
Lamentablemente, muchos habitantes de la Ciudad de Nueva York aún enfrentan barreras importantes para acceder a las pruebas de detección, como brechas en la cobertura de seguro, disponibilidad limitada de citas médicas, problemas de transporte y la falta de días por enfermedad o de tiempo libre pagado. Como resultado, demasiadas personas pierden la oportunidad de detectar el cáncer cuando es más tratable. Esto se refleja en la preocupante realidad de que, en promedio, casi la mitad de todas las muertes por cáncer en la ciudad se deben a cuatro tipos de cáncer que pueden detectarse mediante pruebas: pulmón, próstata, mama y colorrectal.
El Int. #1369-2025 busca eliminar un obstáculo clave para la atención médica preventiva, incluidas las pruebas de detección, al extender el permiso pagado a la mayoría de los empleados del sector privado de la ciudad, un beneficio similar al que ya disfrutan los empleados públicos de la ciudad y el estado de Nueva York.
La presentación del Int. #1369-2025 se produce tras un nuevo estudio que apunta a que las personas que viven en vecindarios con segregación racial y económica en la ciudad de Nueva York tienen más probabilidades de recibir un diagnóstico de cáncer de mama y de cuello uterino en etapas avanzadas.
“Nadie debería tener que elegir entre hacerse una prueba de detección de cáncer que podría salvarle la vida y conservar su empleo”, dijo Michael Davoli, director sénior de relaciones gubernamentales de la Red de Acción contra el Cáncer de la Sociedad Americana contra el Cáncer (ACS CAN, por sus siglas en inglés).
“Nuestra salud física no debería lograrse a costa de nuestro bienestar financiero, ni viceversa. El Int. #1369-2025 ayudaría a eliminar una barrera para los trabajadores de la ciudad de Nueva York al darles la posibilidad de hacerse las pruebas de detección sin arriesgar su salario”, agregó Davoli. “Esta política no solo es popular, sino práctica: ayuda a reducir la rotación de empleados, disminuir el ausentismo y minimizar los días laborales perdidos. Una fuerza laboral más saludable es una fuerza laboral más fuerte y productiva. Agradecemos a la concejal Lynn Schulman y al concejal Oswald Feliz por patrocinar esta legislación, así como a la presidenta del concejo Adrienne Adams por apoyar la presentación de este proyecto de ley. Instamos a sus colegas a reconocer los amplios beneficios que esta legislación aportaría a nuestra ciudad y a la lucha contra el cáncer”.
Si bien muchos estados y localidades han aprobado leyes que requieren que los empleadores otorguen días por enfermedad pagados (los cuales pueden utilizarse para la atención preventiva como las pruebas de detección de cáncer), la ciudad de Nueva York sería una de las primeras en el país en priorizar la atención médica preventiva, incluidas las pruebas de detección de cáncer, mediante un mandato de permiso pagado para los empleadores privados.